sábado, 9 de abril de 2011

Editorial de Diario EL COMERCIO, Quito, Sábado 09 de abril del 2004

SALUD PÚBLICA Y ASESORÍA PRIVADA

La millonaria propaganda oficial dice que la salud pública ha mejorado en el Gobierno de la Revolución Ciudadana, pero mueren centenas de niños recién nacidos, los hospitales están atestados y se tuvo que declarar una emergencia en el sector.

La salud, junto a la inseguridad, el desempleo y la intolerancia, son puntos vulnerables de un Gobierno que, sin embargo, goza de buena aceptación popular. En materia de salud pública una publicidad oficial que derrocha recursos y se puede considerar engañosa muestra un paraíso que no existe cuando los ecuatorianos más pobres llegan hasta los servicios. Se levantó una gran expectativa y ante la demanda creciente no se dio abasto.

Por eso en enero el gabinete presidencial de Baeza decidió declarar una emergencia sanitaria por más de USD 400 millones. La emergencia se amplió por 90 días a los tres meses iniciales. Mientras actores y publicistas pintaban un cuadro maravilloso la tragedia de los niños recién nacidos muertos sacaba de casillas al Gobierno. La demagogia no podía tapar el sol.

Para superar la crisis se contrató a una consultora privada preseleccionada por el Ministerio y que participó en un concurso en el que se descalificó a las firmas opositoras.

Gens Sapiens no tiene experiencia en salud pero contrató técnicos en la materia, el contrato inicial con la consultora privada ascendió a USD 308 460 pero se está por extenderlo a otro de USD 3 400 000.

Ellos recomiendan comprar clínicas privadas para atender la gran demanda popular. En Quito desde hace décadas no se construye un hospital y la ciudad ha crecido.

Llama la atención que el Gobierno que privilegia lo estatal ahora confía un tema tan sensible como la salud pública a una consultora privada. Todo un contrasentido.