jueves, 31 de enero de 2013

Diario El Universo, Jueves 31 de enero del 2013



Un pit bull causó la muerte a niño; can fue apaleado


Un niño de 2 años fue atacado la noche del miércoles pasado por un perro de raza pit bull y por la gravedad de las heridas falleció horas después en el hospital Enrique Garcés, ubicado en el sur de Quito.

Los gritos del pequeño alertaron a los moradores de las calles Diego Bermúdez y Matamoros, que observaron cómo el can mordía al menor.

Según la versión de Patricio Tabango, tío de la víctima, cerca de las 18:00 del miércoles el infante habría subido por una escalera hasta la terraza de su propia casa, donde habitaba el animal, que en forma sorpresiva se le abalanzó.

Tras el ataque, los padres del menor lo llevaron a Emergencia del hospital Enrique Garcés, mientras familiares y moradores del sector de La Mena, en el sur de la ciudad, mataron a palos al pit bull.

Los médicos de esa casa de salud lucharon durante casi cuatro horas por estabilizar al niño. Sin embargo, pasadas las 22:00 falleció por la gravedad de las heridas.

Ayer, en el Departamento de Medicina Legal de la Policía, los padres del infante prefirieron guardar silencio, mientras retiraban el cuerpo. Solo se conoció que ellos sí se encontraban en la vivienda cuando se produjo el incidente y que el niño subió a la terraza en un momento de descuido.

Jéssica Tabango, familiar del niño, señaló que el pit bull vivía desde hace un año en esa casa y que no había presentado antes signos de agresividad, incluso había jugado con otros infantes sin problemas.

Ayer, los familiares y amigos de los padres del menor realizaron una colecta para reunir dinero y enterrarlo. El progenitor del niño se dedica al reciclaje de cartones y lo que gana no le alcanza para afrontar los gastos funerarios.

martes, 22 de enero de 2013

Alex: 880 gramos al nacer




Señores
Servicio de Neonatología
Hospital Base de Puerto Montt
Presente

Nos dirigimos a ustedes, para darles las gracias por ayudar y cuidar a nuestro hijo Alex, y a la vez decirles que para nosotros fue muy satisfactorio atender aquí en Pto. Montt, el caso de nuestro hijo Alex, porque tuvimos la alternativa de viajar a Santiago y el equipo médico nos dio la confianza que aquí también era posible atenderlo.

Para nosotros fue una situación muy fuerte, más aún, porque buscamos la concepción con ansias, pero jamás imaginamos que todo iba a cambiar a partir de la semana 25 de embarazo, cuando me diagnosticaron un Retardo de Crecimiento Intrauterino severo con falta de liquido amniótico (solo tenía lagunas de líquido). La expectativa de vida para nuestro hijo Alex era muy baja, ya que solo pesaba 489 grs., me hospitalicé, con la esperanza de ayudar a este adverso diagnóstico, solo con reposo absoluto, hasta que nació el 12 de dic. 2003 pesando solo 880 grs., era impresionante verlo por su tamaño y además, porque estaba intubado, con suero y  medicamentos, respiración mecánica, oxígeno, etc., sus primeras horas de vida fueron muy complicadas por una hemorragia intracraneana, estuvo muy grave, a raíz de esto decidimos bautizarlo en la UTI para que Dios estuviera con él y lo acompañara.

Luego de superarla apareció un soplo al corazón ( Ductus ) que solo con una intervención quirúrgica se podía curar, fue una decisión complicada porque nuestro hijo solo pesaba 1.080 grs., aproximadamente, y solo tenía un mes de nacido, pero era necesario correr el riesgo por su expectativa de vida, a partir del post-operatorio empezó a mejorar notablemente, estuvo 2 meses en la UTI, fue trasfundido 5 veces, estuvo 45 días con respirador mecánico, luego con CPAP y por último con naricera con oxígeno, cuando cumplió 3 meses de hospitalizado, fue operado de hernia umbilical e inguinal, con una recuperación satisfactoria, estábamos con él mañana, tarde y noche, no sentíamos el cansancio, era tan grande nuestra esperanzas de que iba a salir adelante que así fue.

Es dado de alta el 23 de marzo con oxígeno a domicilio, inhalador para su displasia bronco-pulmonar, hierro para su anemia, vitaminas y leche materna + leche para prematuros, ahora pesa 2.960 gramos.

Para nosotros, ha sido como un milagro tenerlo aquí en casa, después de vivir toda esta situación, aprendimos que solo con fe uno puede afrontar estos difíciles momentos y con la confianza que nos dieron en todo momento en el hospital, aunque al principio nos decían solo que estaba estable pero grave, nadie se atrevía a decir que había alguna mejoría, ahora entendemos que era para no crear falsas expectativas.

Los momentos más importantes para nosotros fueron cuando por primera vez escuchamos que: “estaba mejor”, cuando empezó a alimentarse con leche materna, lo pudimos cargar aun cuando tenía respirador mecánico, cuando lo mudamos en la incubadora, su post-operatorio del ductus, cuando pasó a sala intermedio, bajó a cuna, y por primera vez lo amamanté, cuando dejo de usar permanente el oxigeno, cuando pudimos cargarlo y regalonear con él.

Fueron más de tres largos meses donde nuestras ganas, fuerza interior, fortaleza y la fe en Dios, que si él lo dejó con nosotros fue su voluntad, nos tuvieron firmes en la lucha por la recuperación de nuestro hijo y hoy lo podemos disfrutar junto a nosotros, siendo ahora la familia que tanto añoramos un día.

Quisiéramos agradecer en forma especial a los médicos del Servicio de Neonatología;  al equipo de matronas que siempre estuvieron muy preocupadas por el cuidado de Alex y a todo el personal paramédico que atendió y cuidó a nuestro hijo hasta el día de su alta.

Carola y Alex;  Papás de Alex

Puerto Montt, Marzo de 2004.

martes, 15 de enero de 2013

Sextillizos en México







Uno, dos, tres, cuatro hasta seis bebes: dos niños y cuatro niñas. Con un peso de entre 590 y 800 gramos, los sextillizos nacidos el jueves 10 de enero del 2013 en Morelia, estado de Michoacán en México, se aferran a la vida, pero el pronóstico no es alentador.

“Estoy muy feliz”, dice la madre que esperaba cinco y no seis. Sin embargo dos de las niñas no superaron las primeras horas tras la cesárea.

"Son seis prematuros extremos, de peso bajo e incluso con alto riesgo de mortalidad. Estamos manejando su estado de salud como muy grave", comentó Lizbeth Bejarano, una de las pediatras a cargo.

El más pequeño de los sextillizos pesa apenas 590 gramos y mide escasos 25 centímetros. Aun así, lucha por mantenerse con vida en el área de Cuidados Intensivos del Hospital de la Mujer, donde el pasado jueves su madre dio el mayor alumbramiento de los últimos años en la entidad.

A sus 31 años, esta mujer lleva dos embarazos múltiples y sin haber recibido nunca ningún tratamiento de fertilidad. Según su historial clínico, hace 12 años también tuvo cuatrillizos, producto de su primer matrimonio, de los cuales sobreviven tres: Reyna Rubí, María Perla e Israel.

Hoy, los tres hermanos cursan el primer grado de Telesecundaria en una de las zonas más pobres de Morelia, a donde tienen que llegar cada mañana sorteando una barranca.

Su casa está en obra gris y el frío invernal cala duro, pues la puerta exterior no tiene ventanas y las puertas interiores son un trozo de tela colgado de mecates.

El inmueble también carece de calle. Apenas existe el trazo que se ha ido formando entre rocas y matorrales con el paso de los pocos vehículos que circulan en esa colonia irregular.

"Estoy triste (...) porque no están bien. Puede que se mueran", dijo Reyna Rubí, a quien ahora cuidan sus tías.

Debido a que la madre presentó desprendimiento de placenta y anemia, los médicos no pudieron esperar más y tuvieron que programar la cesárea con apenas 27 semanas de gestación.

Yosio Salinas Rodríguez, el padre de los sextillizos, quien tiene 20 años y trabaja como instalador de tablarroca, dice también esperar un milagro.

"Yo lo que pido (a las autoridades) es que me consigan un trabajo estable, con un ingreso fijo para mantener a mi familia", demandó este joven.

sábado, 12 de enero de 2013

Clínica Cotocollao en la mira de las autoridades

Diario La Hora, Sección País, Sábado, 12 de Enero de 2013





Un marcado nerviosismo hubo ayer por la tarde en la Clínica Cotocollao, ubicada en las calles 25 de Mayo y Lizardo Ruiz, tanto en el personal médico como en el administrativo, porque supuestamente las autoridades de salud habrían dispuesto la clausura de esta casa asistencial.

Ningún directivo de esta clínica quiso hablar sobre la situación sanitaria y legal con respecto a los seis neonatos que habrían resultados infectados, aparentemente debido a las malas condiciones de higiene en la infraestructura hospitalaria. Una de las criaturas falleció por esta causa, el 8 de enero, después de ser trasladada al Hospital Baca Ortiz.

Evacuación de enfermos

Únicamente el abogado de los dueños de la casa de salud privada, Vicente Izquierdo, dijo que una eventual clausura sería “una violación al debido proceso y se atentaría contra la vida de los pacientes (14 en total) que reciben atención en este momento”.

No obstante, en el Ministerio de Salud circuló la versión de que “la clausura se realizará en la tarde de hoy (ayer)”. Incluso a los alrededores de esta entidad llegaron varias ambulancias del Ministerio de Salud -según constató La Hora- supuestamente para evacuar a los enfermos. Varios policías igualmente se hicieron presentes, pero después de un par de horas se retiraron.

Convenio con el IESS

La Clínica Cotocollao, con cerca de dos décadas de funcionamiento, tiene convenio con el IESS para recibir pacientes de esta institución.

Según Vicente Izquierdo en los últimos seis meses se atendieron partos de 170 mujeres embarazadas, sin ninguna novedad. Sin embargo, dejó entrever que estos problemas (infecciones) se han registrado “también en otras clínicas privadas y estatales”.

“No estoy empapado totalmente del caso, en las próximas horas haré un pronunciamiento oficial”, expresó.

El Dato
 Los cinco neonatos infectados se recuperan en el Hospital Baca Ortiz.